ruta caracena-tarancueña-valderromán

es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=200249

Aunque el principio está medianamente señalizado es recomendable llevar gps. Nosotros nos descargamos la ruta en este enlace.

Es una ruta bastante sencilla aunque larga. Llevar comida y agua. Es difícil encontrar dónde comprarla.

Empezamos la ruta visitando Caracena, un pueblo pequeñito, pero con encanto.

Dejamos el coche en una explanada cercana a la iglesia románica de San Pedro en la parte alta del pueblo. Descendimos hasta encontrar la señalización del comienzo de la ruta. El gps nos lió un poco, así que mejor seguir la señal hasta cruzar el puente y a partir de ahí seguir el camino señalizado pasando por el cañón de Caracena.

La ruta es apta para cualquier edad, si bien había llovido y había zonas llenas de barro más complicadas para pasar.

Terminado el cañón llegamos a Tarancueña. A partir de ahí la ruta pierde algo de encanto, aunque no por ello menos entretenida. Pasamos por el pueblo abandonado que indicaban y justo al llegar a la zona más alta nos sorprendió este trío de gamos que se dedicó a posar un buen rato.

Fuimos descendiendo hasta Valderromán y tratamos de localizar la famosa encina, pero no dimos con ella y se nos empezó a hacer tarde, así que tomamos el camino de regreso a Caracena por la vía pecuaria.

Llegando al destino quedamos boquiabiertos al ver las ruínas del castillo. No pensábamos encontrarlo en tan buenas condiciones. Lástima que el sol estaba casi desaparecido, pero pudimos sacar unas fotos bastante decentes.

 

Llegamos ya sin luz y agotados, pero satisfechos por los casi 21 km que nos habíamos paseados y por la bonita ruta que habíamos hecho.